“Sumamos
esfuerzos para la construcción de una ciudadanía solidaria y competente”
Hermenéutica del Escudo
Nuestro Escudo
está integrado por diversos
elementos naturales, culturales e
ideales.
Los elementos naturales que refuerzan nuestra propia
naturaleza humana: ideas, pensamientos y sentimientos compartidos. Ellos son el
cóndor, las montañas, la laguna y el sol.
Todos son muestra de los elementos: La tierra, el cielo, el
fuego y el agua.
El cóndor andino,
de mirada exigente y atenta, configura la actitud con la cual pretendemos
desenvolvernos y anticipan las metas y los resultados.
La montaña es el
puente para alcanzar los ideales y habla del camino, el trayecto del educando y
la experiencia del educador.
La laguna, es
Laguna Blanca: es la claridad, la intensión y el deseo de progresar como
personas y como ciudadanos.
Los elementos ideales son el Sol, la balanza y el cóndor. El Sol son los ideales de la escuela: sus Valores
como la Competencia, la Solidaridad y la Ciudadanía responsable. Valores que
construimos en el día y a día y lo dejamos ver al final de cada labor, por eso
el sol al atardecer o al ocaso.
La balanza es un
instrumento de intercambio, de justicia, de solidaridad y trueque. De carácter
histórico milenario, la balanza es un instrumento de utilidad cotidiana y
necesidad de subsistencia común entre personas, que refuerza el valor de
servicio de la contabilidad.
El contorno del escudo son las cuerdas, la silueta del libro y los símbolos patrios. Todos ellos
apuntan a integrarnos como agentes críticos de una sociedad nacional,
provincial y ciudadana para la búsqueda del bien común, honrando los esfuerzos
de todas/dos.
Las cuerdas nos
refieren a la continuidad entre la educación y el campo social de acción
crítica y solidaria. La silueta del
libro habla de enseñanza aprendizaje basada en las dinámicas de cada
disciplina punto de ampliación y a la vez límite de nuestras aspiraciones
teórico-técnicas.
Los símbolos patrios
son nuestra identidad y destino de nuestros esfuerzos.
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